Encontramos una vez más en el Código Ético de la empresa, el perfil ideal de la persona trabajadora de PACSA:
La empresa se ha esforzado por infundir a las personas que trabajan en PACSA, así como a las terceras partes, el marcado valor humano de quienes se desarrollan en ella.
Las personas que integran PACSA, convierten a la Compañía en un lugar al que sienten que pertenecen. El Plan de Igualdad trasciende lo simplemente laboral o de gestión de Recursos Humanos.
La formación se ha hecho un espacio importante en el día a día, y no sólo interna, sino también a través de recursos ajenos a la empresa. Una formación destinada a beneficiar a la persona trabajadora, tanto en la ampliación de conocimientos como en eliminar obstáculos para realizarla, buscando la mayor conciliación posible.
El Plan de Formación recoge las acciones más favorables para las personas que requieren y/o solicitan formación para el mejor desempeño de sus funciones, revirtiendo, por tanto, en beneficio de la Compañía. Todo ello consensuado y apoyado por los responsables, así como por la Alta Dirección.
Todos ganamos…
La estabilidad en el empleo es una consecuencia de la confianza en la gestión, la sostenibilidad del negocio y de la estrategia diseñada. La perspectiva con la que se mira al futuro garantiza el crecimiento personal y profesional de todos aquellos que trabajan en PACSA, y no sólo el personal laboral, también el personal externo.
